Durante un plazo de aproximadamente nueve años, Porsche reemplazó sus legendarios motores refrigerados por aire, diseño que utilizaba desde el nacimiento de la marca, por otros más modernos refrigerados por una mezcla de agua y anticongelante, conocidos también como watercooled. Este diseño es el más habitual en cualquier coche moderno, ya que permite un mejor control de la temperatura del motor.
Estos nuevos motores, de las familias M96 y M97, han acumulado tan mala fama por la avería de una simple pieza que mantiene por debajo de lo normal los valores residuales de los Boxster, Cayman y 911 que los montan. Es posible evitar a tiempo la muerte del motor -que puede valer casi lo mismo que el coche- con piezas de recambio de terceros. [Leer más…]